Cómo educar las emociones
Con la práctica del juego se consigue un conocimiento de nosotros mismos a través de la expresión de nuestras emociones, es un aprendizaje continuo que recorre de forma transversal el resto de competencias, habilidades y destrezas del niño a lo largo de su ciclo vital. Otro de los aprendizajes consiste en la detección y el conocimiento de las emociones ajenas, otro de los pilares básicos de la inteligencia emocional, junto al conocimiento de las propias emociones. También se desarrollan habilidades como respuestas emocionales ante diferentes situaciones que el niño habrá de afrontar.